El gran Sur

Son la 8 de la tarde, llega Comandante.

- Oye, ¿como es la tienda que levamos?
- Yo que se, es de mi hermano.
- ¿Es canadiense? ¿o es un iglú?
- ¿Y eso que es?
- Mierda, una canadiense es triangular, un iglú es una cúpula.
- No se.
- ¿Es una cúpula?
- No se.
- Entonces es una canadiense.
- Pues será una canadiense.
- De acuerdo, entonces no pillo la mía, ya cabremos. Oye, ¿y el tanque aguantará hasta Murcia?
- ¿No querías ir tu hasta Vladivostok? Aguantará, fíjate que al final he reparado el retrovisor derecho.
- joder que lujo.
- Y ahora hay luz en el interior.
- Joder que lujo.
- Y ya no hace falta abrir siempre desde el acompañante, abre la puerta del conductor.
- Joder, ni en limusina, oiga.
- Venga, súbete, que vamos a recoger a Isaac a Terrassa.
- Oye, ¿y de música que tenemos?
- Tengo una cinta que se mete en el casette del coche y le puedes conectar un mp3, un discman o lo que sea.
- Ni los del tunning, nen.

Subimos al coche, vamos a Terrassa, subimos a casa de Isaac. Cenamos algo y volvemos al coche. Son las diez cuando empezamos el viaje, a Murcia.

- Oye, ¿has encontrado camisetas contra el trasvase?
- No, hubiera molao.
- Mierda, hubiéramos dado el golpe.
- No se yo quien hubiera dado el golpe a quien.
- Al carajo, vamos para allá.
- Oíd, lo he mirado y podemos pasar de los peajes, vamos por la N-340 hasta sagunto.
- De puta madre, a ver si se han creído que somos tontos.

Tres horas después estamos en Sagunto.

- Mierda que lentos vamos.
- Ahora cogemos la autovía, creo.

La cinta salta por enésima vez, oímos las canciones a cachos, si la cinta quiere, suena, si no, no. Nos va poniendo de los nervios, de vez en cuanto nos hartamos y no suena nada, solo el mundo.

Cambiamos de conductor, conduce Isaac. Zumbamos dirección sur a muerte, adelantando camiones por la nacional, luego viene la autovía, Comandante duerme, Isaac durmió cuando iba atrás, yo no duermo.
Pasamos valencia, cojo yo el coche, adelantamos camiones.

- Oye Comandante. ¿es normal que el motor esté tan caliente?
- Si, esa es la temperatura normal
- De acuerdo, en el mío es más baja.
- Si se dispara la luz de temperatura es cuando está caliente de verdad.

Seguimos zumbando, el tanque va a 130. Comandante. dice:

- Mierda, acelera!
- Mierda, paso de ir a 160, son las 2 de la madrugada y no he bebido ni un trago.
- Al menos ves a mas de 100, el camión ese nos pisa los talones.
- Mierda, el hijoputa va lanzado a 130!
- Adelanta a ese camión y lo perdemos de vista.

El diablo de la carretera lo adelanta detrás nuestro, con dos cojones, no se ve una mierda y el cabrón adelantando camiones en una carretera de un carril por sentido.

- Mierda, ha adelantado también.
- ¿Tu has visto esa película del spilberg?, ¿la del camión que persigue al gilipollas?.
- Mierda, acelero.
- Acelera.

Lo dejamos atrás. llegamos a la autovía, zumbamos para abajo.

- ¿Alicante o Albacete?
- Yo que sé, Alicante supongo.
- Pone que es peaje.
- Mierda.
- A tomar por culo, por Albacete, ya podremos girar luego para Murcia. Ahora no vamos a pagar.
- A tomar por culo!

Autovía, pasamos Xativa, de repente se enciende una luz en el salpicadero.

- Mierda Comandante. el motor está que arde.
- Joder, sal de aquí.
- Tenemos una salida a mil metros, allá salgo.

Salimos a la carretera, justo antes de meter el coche en el arcén, empieza a soltar humo. Lo dejo en la cuneta.

- Mierda, ya lo hemos quemado.
- Abre el capó.
- Buf! que humo.
- Mierda!

Se ha roto un manguito, tiene un poro. Isaac lo corta y intenta que el resto del manguito llegue a destino, no lo hace. pero el coche arranca, no lo hemos gripado.

- Mierda, estamos tirados.
- Comandante. mira el seguro, que tienes?
- Yo que sé, vamos a mirar.

Tenemos asistencia en carretera. Comandante. llama. Nos viene a recoger una grúa, nos dicen que el sábado reparan el coche, que nos ponen un taxi a Murcia y que luego nos ponen un taxi de Murcia a donde esté el coche.

- De puta madre, p'alante.

Hace frío, el de la grúa nos pregunta en que carretera estamos, se lo decimos, el tío no sabe llegar. Comandante y yo nos damos un paseo por la maleza a las 4 de la mañana para ver el cartel de la salida de la autovía. Lo iluminamos con la luz de un mechero (Gracias Elsa), se lo cantamos al de la grúa, a los diez minutos está allí.

- ¿Y cuando estará el coche?
- ¿Que le pasa?
- Un manguito roto.
- Uh, hasta el martes no abre nada por aquí.
- Mierda, el martes trabajamos.
- Pues no hay nada.

Llamamos a los del seguro, hablan los del seguro y el de la grúa, están subastando mis vacaciones.

- Nada, no hay nada hasta el martes.
- Mierda, pues entonces no vamos hasta Murcia, volvemos a Barcelona.
- Os ponemos un taxi igual. Debe estar a punto de llegar ya.

Isaac dice que cogemos su coche en Terrassa y seguimos el viaje. El mío se queda de reserva.

El de la grúa monta el coche, dice que se va, bajamos los trastos y la tienda. Nos deja en el arcén esperando el taxi.

- De puta madre, que plan.

Media hora después llega el taxi, alucina con que la grúa no se quedara con nosotros. Yo no me cabreo con el de la grúa, tendría un culo esperando que volviera.

el taxi es un Omega, un pedazo de trasto, los bártulos que iban apretujados en el tanque, aquí bailan en el maletero.

No aguanto diez minutos despierto, abro los ojos en Cerdanyola.

- Joder que rápido, que hora es.
- Las ocho y media.
- Mierda, hemos llegado en dos horas y media, menos mal que me he dormido.

El taxi nos deja en casa de Isaac. Desayunamos, van a buscar el coche de Isaac en moto. Me quedo en su casa, nunca me gustó ir de paquete.

Hacen "V" por la cuatro, la malísima Diana está torturando a la jefa de la resistencia. Donovan todavía no es el mandamás, sale cuando el lagarto (Freddy kruegger) y la humana se enamoran, sale la quinta columna de los lagartos. Carajo, uno de los capítulos cumbres y lo estoy viendo. Pero llegan con el coche, dejo "V" en su clímax reptil y bajamos al coche, ahora nos lo tomamos con más calma. Seguimos solo por carretera, ni un puto peaje. Por la tarde estamos en Xativa, pasamos el punto crítico, ya nada nos separa de Murcia.

Llegamos al pueblo a las 9 de la noche. 25 horas después de que Comandante me recogiera en mi casa. Demasiado tarde para ir al camping. Llevamos 26 horas sin beber, y yo he dormido dos horas y media, a la mierda la ducha.

En el pueblo no paran de darle a los tambores, dentro de los bares, por las calles, pero no me importa, nos encontramos a los compañeros de erasmus de Comandante. Llevan bebiendo desde el mediodía. Recupero el terreno perdido, acabo hablando sobre pink floyd con uno de Cieza. A las 3 de la mañana están rotos, nosotros también. Decidimos ir al camping.

Entramos con ellos, el guarda nos para.

- ¿Vais a poner la tienda?
- Si.
- Es muy tarde para clavar, no podeis.
- Uy, no clavamos, solo la montamos.

Mierda, sacamos la tienda, las canadienses se clavan primero y luego van los palos. Los iglús al revés. Clavamos las piquetas con la palma de la mano, para no hacer ruido. Cuando vamos a poner los palos vemos que es un iglú.

- Mierda Comandante ¿no decías que era una canadiense?
- Yo que se, es de mi hermano.
- Mierda, esto es un iglú.
- Yo que sé, te montas la película tu solo.

Ponemos la varillas con la tienda clavada, error, se suelta un enganche, la tienda cojeará los dos días. El hermano de Comandante tendrá que coserla.

Nos despiertan a las 8:30 de la mañana los vecinos de camping con la Macarena a todo trapo, después vendrá una larga lista de hits casposos.

- Mierda de vida. Y nosotros clavando piquetas con la mano.
- En los ojos se las clavaba ahora.

Se oye como hablan gritando, un niño hace alguna travesura, le gritan.

- Rayaaaan!

Eso me reconcilia con el mundo, ya tiene bastante el niño con llamarse Bryan, con dos cojones, ni Kevin Costner Jesus ni pollas, Bryan.

Ese dia empezaremos a beber al mediodía. No tendrán agua, pero alcohol no les falta. Esa noche no hay terreno que recuperar.

Alguien dijo que lo importante no es llegar al destino, sino el viaje. Teniendo en cuenta que el destino son los gusanos, no está del todo mal el viaje. Y si el camino se divide, y tienes que elegir entre izquierda y derecha, tu sigue recto.

Y que amanezca por donde quiera.